Mantenerse ocupado sólo con el propósito de sentirse bien (o no sentirse mal, que es distinto), no tiene nada que ver con un criterio de productividad. Tampoco con la lógica de “aprovechar positivamente” el tiempo o combatir la pereza. La productividad es siempre una consecuencia de enfoque y propósito. Una dinámica de acciones que busca…